Amar a mi prójimo

Mateo 5:43-48 (versión Reina Valera 1960)

43 Oísteis que fue dicho: Amarás a tu prójimo, y aborrecerás a tu enemigo

44 Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen;

45 para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos.

46 Porque si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa tendréis?¿no hacen también lo mismo los publicanos?

47 Y si saludáis a vuestros hermanos solamente, ¿qué hacéis de más?¿No hacen también así los gentiles?

48 Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto.

Revisemos la siguiente historia que ilustra este tema

Marcos estaba cansado que por culpa de Juan le estuviesen molestando todo el tiempo en la escuela, cada día en el receso Juan aprovechaba para bromear o hacerle alguna maldad a Marcos. Marcos estaba cansado de esto y ya no sabía como hacer para librarse. Marcos era un excelente alumno con muy buenas calificaciones, sin embargo Juan apenas lograba pasar de un año a otro. Llegó el momento en que la maestra le pidió a Marcos que ayudara a Juan con unas tareas de geografía puesto que de ello dependería que Juan lograra pasar al siguiente año. Juan protestó y pidió que le asignara a otra persona pues pensaba que era la oportunidad para que Marcos se vengara de él, a lo cual la maestra con voz firme indicó que no, que era Juan quién le iba a ayudar y eso no lo discutiría. Al principio por la mente de Marcos paso el hacerle alguna maldad sin embargo al poco tiempo pensó que no debía hacer eso y le ayudo con todo su esmero a poder cursar el año. Ya al año siguiente Juan parece que no recordaba lo que Marcos había hecho por él, y nuevamente se iniciaba el mismo círculo vicioso. Sin embargo Marcos ya no le da tanta importancia, él ha aprendido a estar dispuesto a hacer el bien, aún a Juan quién no lo deja en paz.

El ser humano tiende a escoger a quién manifestar el amor y afecto, y a quién no.

Es necesario que extendamos nuestro afecto y amor a todas las personas

Estos versos se enmarcan dentro del reconocido sermón del monte el cual representó en ese momento un sinnúmero de aclaratorias para quienes escuchaban respecto a lo que culturalmente habían aprendido como enseñanza cultural y como parte de sus tradiciones religiosas. Muchas de las cosas que Jesús en ese entonces indicaba se referían a su forma de compartir entre ellos, en cuanto a la forma de manejar su ira, en cuanto a su conducta moral, como manejar sus problemas con sus vecinos, como orar y ayunar, cual debe ser el enfoque de sus vidas, entre muchos otros temas.

¿Cuál es la medida de Jesús para amar a nuestro prójimo?

1.      lo que hemos aprendido desde pequeños. V43

“Oísteis que fue dicho: Amarás a tu prójimo, y aborrecerás a tu enemigo”

la cultura judia practicaba esto como parte de un código, es decir marcaban una clara y delimitada diferencia entre quienes le hacían el bien y quienes no. De ese mismo modo en que la gente les trataba ellos le trataban, era un claro ojo por ojo y diente por diente.

Hoy día en nuestra sociedad, y a pesar de tener una cultura diferente, las cosas no han cambiado mucho, seguimos con un pensamiento de tratar bien solo a quienes nos tratan bien. Esto desde casa lo aprendemos y lo vemos cada vez más marcado al ir pasando los años e ir creciendo.

2.      lo que enseña Jesús. V44, 46 y 47

“Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen;

“Porque si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa tendréis?¿no hacen también lo mismo los publicanos?”

“Y si saludáis a vuestros hermanos solamente, ¿qué hacéis de más?¿No hacen también así los gentiles?”

A quienes escuchaban al Maestro en ese momento, esto les parecía algo imposible de cumplir, esto era demasiado lo que se les pedia, era como desaprender sus costumbres para adquirir nuevas costumbres, no era algo fácil lo que Jesús les decia que debían hacer. ¡Amar a tu enemigo!, esto no podían asimilarlo e iba en contra absoluta de lo que desde niños habían escuchado.

Estoy seguro que para usted al escuchar estas palabras de Jesús, el asunto no le suena muy diferente a lo que les sonaba a quienes escuchaban al Señor en aquellos días. Nuestra sociedad tampoco habla de amor a quienes nos hacen daño, sin embargo esta si es la voluntad de Cristo. El Señor está esperando ver en quienes dicen ser sus seguidores actitudes diferentes al resto de las personas, que donde los demás ven ocasión para el odio, rencor y rencillas; quienes le sigan vean ocasiones para amar, perdonar y crear paz.

3.      el fruto de hacer lo que dice Jesús. V45

“para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos”

Jesús aquí no quería decir que sino hacías esto no ibas a ser su hijo, sin embargo lo que si quizo dejar plasmado fue que si actuas como él te lo ha indicado, entonces será notorio que eres su hijo, que eres un hijo de Dios.

Dios porque el ser humano actue mal no deja de mostrar su misericordia y amor para con ellos, si bien sabemos que sino se arrepienten habrán consecuencias. Sin embargo Dios está interesado en que como sus seguidores le imitemos, no por obligación ni por obtener mérito; sino por el simple hecho de querer ser como él; El Señor desea que tu también extiendas bendición sobre quienes te hacen bien y sobre quienes te hacen mal, a fin de que sea notorio que eres un Hijo de Dios.

4.      la medida que espera Jesús que alcancemos. V48

“Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto”

Como ya lo mencionamos Dios en su inmenso amor y misericordia la extiende a todos; así también espera que nosotros quienes nos hacemos llamar sus hijos la extendamos a cada persona sin importar su raza, religión, sexo, estatus social, etc. No hay nada sobre esta tierra que nos haga poder hacer una excepción a esta regla.

Hoy Dios te habla acerca del amor hacia tu prójimo muy probablemente has tenido situaciones en las que has fallado en ello, por eso en esta hora Dios te invita a ponerte a cuentas con él y pedirle que te perdone.

Y si aun no conoces a Dios, hoy has visto que Él ha extendido su amor y misericordia hacia ti por lo que hoy puedes reconocer en tu vida que le has fallado y que crees que Jesús es su hijo y que a través de lo que hizo en la cruz al derramar su sangre te ha manifestado de forma visible su amor y por ello aceptarle a Jesús como tu Salvador personal ¿Se lo dirás a Jesús?