lunes, 21 de septiembre de 2015

Alianzas que te maldicen





Éxodo 23: 20-33 

El Angel de Jehová enviado para guiar a Israel

20 He aquí yo envío mi Angel delante de ti para que te guarde en el camino, y te introduzca en el lugar que yo he preparado.
21 Guárdate delante de él, y oye su voz; no le seas rebelde; porque él no perdonará vuestra rebelión, porque mi nombre está en él.
22 Pero si en verdad oyeres su voz e hicieres todo lo que yo te dijere, seré enemigo de tus enemigos, y afligiré a los que te afligieren.
23 Porque mi Angel irá delante de ti, y te llevará a la tierra del amorreo, del heteo, del ferezeo, del cananeo, del heveo y del jebuseo, a los cuales yo haré destruir.
24 No te inclinarás a sus dioses, ni los servirás, ni harás como ellos hacen; antes los destruirás del todo, y quebrarás totalmente sus estatuas.
25 Mas a Jehová vuestro Dios serviréis, y él bendecirá tu pan y tus aguas; y yo quitaré toda enfermedad de en medio de ti.
26 No habrá mujer que aborte, ni estéril en tu tierra; y yo completaré el número de tus días.
27 Yo enviaré mi terror delante de ti, y consternaré a todo pueblo donde entres, y te daré la cerviz de todos tus enemigos.
28 Enviaré delante de ti la avispa, que eche fuera al heveo, al cananeo y al heteo, de delante de ti.
29 No los echaré de delante de ti en un año, para que no quede la tierra desierta, y se aumenten contra ti las fieras del campo.
30 Poco a poco los echaré de delante de ti, hasta que te multipliques y tomes posesión de la tierra.
31 Y fijaré tus límites desde el Mar Rojo hasta el mar de los filisteos, y desde el desierto hasta el Eufrates; porque pondré en tus manos a los moradores de la tierra, y tú los echarás de delante de ti.
32 No harás alianza con ellos, ni con sus dioses.
33 En tu tierra no habitarán, no sea que te hagan pecar contra mí sirviendo a sus dioses, porque te será tropiezo.




Introducción: ¡dime con quién andas, y te diré quién eres! Una frase muy sonada pero que en muchas ocasiones resulta ser muy cierta. Quizás no tanto por el hecho de que con quien andes significa que estarás haciendo lo que ellos hacen, pero muy probablemente al verte la gente piense que andas en lo mismo, o aún peor quizás con el tiempo seas atraído a lo mismo.

Proposición: en esta noche veremos a la luz de la palabra como puede llenarnos de bendición o maldición las amistades o personas con quienes estemos compartiendo cosas.

 

1.       El Señor nos fija límites y nos hace fuertes v. 31

 

En el contexto de la escritura leída observamos que el Señor había prometido a Israel fijar límites delante de la tierra que Él les estaba entregando. En el verso 23 vemos que el ángel del Señor iría delante del pueblo de Israel haciendo sucumbir los pueblos paganos y brindando así la posesión de la tierra a su pueblo; pero es interesante notar que en el verso 24 el Señor señala su mandato de no inclinarse delante de los dioses de esos pueblos, sino más bien da la instrucción de eliminarlos. Y en el verso 25 indica claramente la bendición que daría si fuesen fieles (las mujeres serían fértiles, bendeciría el pan y las aguas, y quitaría toda enfermedad).

 

Pero además de todo esto el Señor indica en el verso 31 en su parte final de que Él pondría en las manos del pueblo de Israel a los moradores de esa tierra y que ellos mismos los echarían de delante de ellos, es decir prometía darles las fuerzas para obtener la victoria.

 

Hoy día usted y yo mi querido amigo y hermano tenemos delante de nosotros la oportunidad de recibir la bendición de Dios si obedecemos fielmente a lo que Él nos manda, tu y yo tenemos la oportunidad de que Él entregue en nuestras manos la victoria en medio de las situaciones más complicadas de esta vida, pero todo ello dependerá de nuestra comunión con Él y nuestra obediencia a Él.

 

 

 

2.       El Señor nos insta a cuidar de con quién hacemos alianza  v.32

 

Como bien expresábamos en el dicho indicado al inicio es culturalmente un peligro aliarnos a personas con una reputación no adecuada, pero cuanto más peligroso será el aliarnos o hacer amistad con personas que no comparten nuestros principios, nuestra fe, nuestras costumbres, nuestros ideales, en fin ¿cuan peligroso no será si empezamos a compartir nuestro valioso tiempo (que en realidad ni siquiera es nuestro sino que es de Dios y nosotros solo lo administramos) con personas que en lugar de traernos fortalecimiento en nuestra relación con Dios nos aparten de Él?

 

Este es un tema de mucho debate, y que son muchas las posiciones, pero si observamos el contexto del verso 32 antes leído podremos notar que el Señor aquí indicaba a su pueblo Israel un mandato claro de que al ellos tomar posesión de la tierra que Él les estaba dando no deberían por ninguna causa aliarse a las personas que ocupaban antes de esto dicha región.

 

Quizás usted diga ¿pero cuál era el problema?¿por qué debían actuar así? Pues la respuesta es más sencilla de lo que parece, pues resulta que estos pueblos eran pueblos entregados a la idolatría, a la inmundicia, a vivir desordenadamente y abiertamente en contra de todo lo que Dios ordena. Por ello el que el pueblo de Israel hiciese alianza con ellos representaba un acuerdo que les permitiría mantener estas prácticas abominables en medio de ellos lo cual sabemos que Nuestro Dios, quien es celoso y no comparte su gloria con nadie, jamás aprobaría.

 

3.       El peligro en hacer alianzas con quienes el Señor no aprueba v.33

 

En este verso el Señor nos da una clara evidencia del peligro que hay en que nosotros hagamos alianza con quién Él no aprueba, el mayor peligro esta en que estas personas nos hagan pecar contra Él. Y quizás aquí muchos se hagan los fuertes, se hagan los más espirituales pensando en que eso será con otro hermano pero no conmigo, pero sabes si el Señor lo dice por algo es.  En realidad las estadísticas son muy claras:

 

-          Cantidad de jóvenes que inician noviazgo con inconversos. Resultado = la mayoría terminan alejándose del Señor

-          Cantidad de jóvenes que toman como amigos a inconversos. Resultado = la mayoría termina haciendo cosas que no agradan a Dios

-          Cantidad de adultos y jóvenes tratando de ser aceptados en un grupo de inconversos. Resultado = practicas no agradables a Dios

Estos son solo ejemplos, pero la historia se repite una y otra vez. En el texto vemos que el Señor se lo advertía al pueblo de Israel antes de ellos tomar posesión de la tierra prometida y al leer la palabra vemos que tal cual el Señor lo advirtió cuando hicieron alianza con los pueblos paganos se desviaron y terminaron preparando altares (lugares altos) para adorar a dioses paganos y hacer cosas que a Dios no agradan incluyendo el sacrifico humano de niños.

No se que cosas en tu vida hoy representan alianzas con el mundo, pero hoy el Señor nos da un llamado de atención a ser cuidadosos, a no tener en poco este hecho. Porque los peligros que incluye esto pueden repercutir en maldición, en consecuencias no deseadas que en muchas ocasiones terminan dañando nuestro testimonio, nuestra integridad como personas, nuestra salud e incluso acabando con nuestras vidas. 

Hoy tienes la decisión en tus manos  - se fiel al Señor y Él te bendecirá – haz alianzas no aprobadas por Dios y verás las consecuencias inevitablemente.

martes, 8 de septiembre de 2015

Los Estándares de Dios


Malaquias 3: 6 “Porque yo Jehová no cambio; por esto, hijos de Jacob, no habéis sido consumidos”

 


Introducción: Deuteronomio 4: 9 dice “Por tanto, guárdate, y guarda tu alma con diligencia, para que no te olvides de las cosas que tus ojos han visto, ni se aparten de tu corazón todos los días de tu vida; antes bien, las enseñarás a tus hijos, y a los hijos de tus hijos”

Como observamos aquí nos manda el Señor a pasar de una generación a otra lo que Él nos enseña no nos dice que ajustemos la palabra entre una generación y otra sino que nos dice que la pasemos así mismo entre una y otra.

Muchas veces encontramos a personas diciendo que bueno eso eran otros tiempos, que las cosas ahora son distintas, queriendo en cierto modo hacer ver que eso no es aplicable 100% a nuestros días, pero la verdad de todo esto es que se quiere justificar lo injustificable, puesto que Dios no cambia sus reglas tampoco cambian, somos nosotros los que debemos ajustarnos a sus estándares y olvidarnos de lo que el mundo nos empuja a hacer, puesto que este mundo cada día se sumerge más y más en cosas que para nada agradan a Dios.

                   

Proposición: en esta oportunidad revisemos a la luz de la palabra de Dios este interesante tema…

1.       Dios no cambia.  Malaquias 3:6 “Porque yo Jehová no cambio; por esto, hijos de Jacob, no habéis sido consumidos” y  Santiago 1: 17 “Toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre de las luces, en el cual no hay mudanza, ni sombra de variación”.

 

Como observamos en ambos textos nos indica que Dios no presenta ningún tipo de cambios, Él es quien es, sus estándares y estatutos son los que son desde el principio. 

 

El hombre en su afán de querer introducir el libertinaje a su vida cotidiana trata de ajustar los estándares de Dios a como él quiere vivir, lo cual sabemos que no es posible puesto que Dios ha decretado cómo quiere las cosas y no está dispuesto a qué hagamos cómo nosotros queramos sino más bien desea que nosotros entendamos que ya Él dio sus reglas y no hay opciones de adaptarlas, es simple o las cumples o no las cumples, o las obedeces o no las obedecemos aquí no hay términos medios.

 

 

2.       Lo que el mundo te pide

 

Hoy como en muchos otros tiempos la sociedad:

 

- intenta que la iglesia viva aceptando todo lo que ellos hacen,

 

- intenta que la iglesia se ajuste a ellos,

 

- intenta que la iglesia no señale sus acciones como pecado;

 

Pero sabemos hoy que Dios no desea que nosotros nos adaptemos al mundo sino más bien que seamos luz en medio de las tinieblas que en este mundo se vive. Decimos que son tinieblas puesto que intentan ocultar la maldad detrás de todo lo que se hace por ejemplo:

 

- intentan ocultar la maldad detrás de la infidelidad,

 

- intentan ocultar la maldad detrás del desenfreno y liberalidad sexual entre los jóvenes, adultos e incluso de los niños;

 

-intentan ocultar la maldad detrás del uso de estupefacientes, drogas, alcohol, cigarrillos, etc haciendo pensar que nada malo va a pasar si los usan y que el único problema es si se dejan controlar, aunque bien saben ellos que aunque no quieran aceptarlo el usarlos los lleva a ser controlados por ellos.

 

En fin son muchas las cosas que el mundo trata de engañarse haciendo ver que no son malas dichas acciones pero la iglesia de hoy lamentablemente en muchas de ellas no abre sus ojos y muchos de sus miembros toleran dichas acciones e incluso participan de ellas sin pensar en lo mal que están haciendo delante de los ojos de Dios.

 

3.       Lo que Dios te pide

 

Dios ha dejado a todos nosotros, sus hijos, las reglas claramente expuestas en su palabra para guía, para conocimiento nuestro, además de que nos ha dado su consolador, su Espíritu Santo, quien nos lleva a entender cuando algo es aceptable o no delante de los ojos de Dios; por ello debemos estar bien claros en que Dios es bueno y desea solo lo mejor para sus hijos y por ello el obedecer a lo que Él pide, sin tratar de modificar nada traerá a nosotros su bendición.