sábado, 2 de noviembre de 2013

¿Qué pide Jehová tu Dios de ti?

Deuteronomio 10:12-13 Ahora, pues, Israel ¿Qué pide Jehová tu Dios de ti, sino que temas a Jehová tu Dios, que andes en todos sus caminos, y que lo ames, y sirvas a Jehová tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma, que guardes los mandamientos de Jehová y sus estatutos, que yo te prescribo, para que tengas prosperidad?

Revisaremos lo que dice la palabra que debemos hacer para demostrarle amos a Dios, lo cual va muy relacionado con uno de los requerimientos que Dios tiene para todo aquel que dice creer en El.

Veamos de forma fragmentada lo que El Señor pide de nosotros.

1) Que temas a Jehová tu Dios
Temer a Jehová no tiene nada que ver con tenerle miedo a Dios, sino más bien con darle reverencia y respeto. ¿Y cómo le mostramos reverencia y respeto a Dios?, bueno en primer lugar teniendo un claro concepto de ambas reverencia (veneración, culto y respeto) (sumisión/consideración o reconocimiento del valor de una persona o cosa.) y en segundo dándole realmente ese primer lugar en nuestras vidas, tal y como él lo pide.

2) Que andes en todos sus caminos
Prestemos mucha atención a la palabra "todos", El Señor no nos pide algunos, sino todos, es decir, debemos desde orar y leer la palabra hasta congregarnos y serviles. No debe ser algo simple o conformista pudiendo caer en el pecado de creer que tal cual estamos en este momento estamos bien, sino que El Señor espera que constantemente estemos enrumbando nuestros pasos en cada una de las áreas de nuestra vida hacia lo que El espera de nosotros. Analicemos el porqué, "andes" es un verbo de acción continuo, es decir no solo ahora o que será en un futuro o fue en el pasado; sino que debe ser algo constante, sin detenerse, sin tomar descanso. Dios no espera ver en ti alguien que camines un tiempo en sus caminos, sino alguien que no desmaya en su búsqueda de Dios.

3) Y que lo ames
Tal como lo revisamos basados en Juan 14:21, el amor a Dios se demuestra con la obediencia a su palabra.

4) Y sirvas a Jehová tú Dios con todo tu corazón y con toda tu alma.
El servicio a Dios es muchas veces descuidado por creyentes en todas partes, muchas veces hemos escuchado expresiones como: ¡es que no tengo oportunidad porque estoy muy ocupado! ¡Es que no veo nada en que ayudar, porque ya lo hacen todo! O muchas similares; pero realmente cuando un creyente quiere servir a Dios encontrara el momento propicio para servirle, así sea recogiendo un papel, limpiando el piso del templo, arreglando las bancas, saliendo a evangelizar, invitando a otros a los cultos, escuchando a personas que atraviesan problemas, dando a los más necesitados, en fin existen muchas maneras de servir a Dios; pero es necesario que de una manera u otra cada creyente lo haga a fin de estar obedeciendo a esto que el Señor nos manda. Ahora bien, no por obligación, sino como dice el pasaje con todo tu corazón y con toda tu alma, es decir con todo tu ser y tus fuerzas, y movido principalmente por tu amor por El.

5) Que guardes los mandamientos y sus estatutos.
Esto va directamente relacionado tanto con andar en todos sus caminos, como en amarlo. ¿Por qué podría alguien andar conforme a la voluntad de Dios sin guardar los mandatos del Señor? O ¿Cómo puedes amarle sin obedecer su palabra? Realmente es imposible.

6) Para que tengas prosperidad.
No porqué el Señor te prometa esto debes hacerlo, sino porque dentro de sus mandatos manda a que lo amemos.

El ser prosperado por Dios debe ser solo el reflejo o pago dado por Dios para quien cumple con cada uno de los puntos antes señalado: temer a Jehová-andar en sus caminos-amarlo-servirle-y guardar sus mandamientos. Luego de haber revisado todo esto podríamos entonces pensar o concluir que únicamente con una vida dispuesta a dejarse moldear por el maestro y no dada a sentimientos de conformidad con lo que se es hoy, podrá entonces llevarnos a cumplir lo que Dios pide de cada uno de nosotros.

No hay comentarios:

Publicar un comentario